Aluminio | 2025-10-28 07:23:14
Además, existe una gran incertidumbre sobre cuándo se dispondrá de proyectos renovables a la escala necesaria, añadió.

SEATTLE (Monstruo de la Chatarra): El gigante minero mundial Rio Tinto ha lanzado la advertencia de que su Fundición de Aluminio de Tomago, la mayor de Australia, podría verse abocada al cierre después de 2028 debido a las dificultades para garantizar un suministro energético viable una vez que expire su actual acuerdo eléctrico con AGL Energy.
La empresa destacó que el aumento de los costes de la energía y las incertidumbres sobre el suministro amenazan el futuro de la instalación, que desempeña un papel fundamental en la producción de aluminio de Australia. La fundición ya se ha visto presionada por la escalada de los precios de la energía, impulsada en gran medida por la transición acelerada del país hacia fuentes de energía renovables.
La electricidad representa más del 40% de los costes operativos de Tomago, lo que la hace muy sensible a las fluctuaciones del precio de la energía. Se prevé que tanto la energía de carbón como la energía renovable se encarezcan en los próximos años, lo que plantea serias dudas sobre la viabilidad comercial a largo plazo de la planta una vez que finalice el acuerdo actual.
El consejero delegado de Tomago Aluminio, Jerome Dozol, declaró que todas las ofertas de mercado recibidas hasta ahora indican precios inviables, lo que hace imposible mantener operaciones rentables en las actuales condiciones de mercado. Además, señaló que el momento y la escala de la disponibilidad de energía renovable siguen siendo inciertos, lo que agrava los retos de garantizar un suministro estable y asequible.
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En respuesta a la inminente fecha límite, Rio Tinto ha iniciado consultas con empleados y representantes sindicales para evaluar los posibles resultados para la fundición. Los interesados tienen hasta el 21 de noviembre para dar su opinión sobre la situación, tras lo cual la empresa tomará una decisión definitiva sobre el futuro operativo de la planta.
La situación subraya las tensiones más generales a las que se enfrentan los sectores industrial y energético de Australia, mientras los principales productores tratan de equilibrar los objetivos de descarbonización y la fiabilidad energética en un panorama energético cambiante.
La fundición está luchando con el aumento de los costes energéticos, que suponen más del 40% de sus gastos de explotación, agravado por la transición de Australia hacia las energías renovables y la falta de opciones de suministro eléctrico comercialmente viables.
El consejero delegado Jerome Dozol afirmó que todas las actuales propuestas del mercado para los precios futuros de la energía no son comercialmente viables y expresó su incertidumbre sobre cuándo estarán disponibles los proyectos renovables a la escala necesaria.
Rio Tinto ha iniciado consultas con empleados y representantes sindicales sobre el posible futuro de la planta. Las opiniones se recogerán hasta el 21 de noviembre, tras lo cual se tomará una decisión final.
